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miércoles, 25 de enero de 2012

Día 22: Decir cuándo y a qué hora para que las cosas sucedan.

El segundo paso que posteé para a principios de diciembre del año pasado era “Hacer el mapa y fijar las fechas”. Este paso va muy de la mano del primero, que es del que he venido escribiendo. Pero podrías preguntarte, y por qué Marlon primero habla de conseguir una brújula y luego de hacer el mapa. Sencillo. Esa brújula afirmé que es el rumbo a seguir, pero luego de que hemos ubicado el objetivo, lo mejor es encontrar el mejor camino para llegar. La planificación es en efecto ese mapa para llegar a aquel objetivo que nos fijamos. Pero no solo eso es importante. En una cultura como la nuestra, lo mejor es fijar fechas perentorias, no negociables con nosotros mismos. Ayer mismo me pasó algo que sucede todos los días en Guatemala: un amigo al que hacía buen tiempo que no contactaba me llamó por teléfono y estuvimos charlando por un largo rato. Antes de colgar me dijo la famosa frase “a ver cuándo nos tomamos un cafecito”. Con la diplomacia que me caracteriza (que no vaya a ser mucho) rápidamente le dije: “vos como que no te querés juntar conmigo, verdad”. A lo que él rápidamente replicó “pero si te acabo de decir que nos juntemos”. “Sí”, le repliqué, “pero –a ver cuándo- es sinónimo de nunca, mejor decime cuándo, a qué hora y dónde, y estamos hechos”. Por supuesto que le saqué una risa pero más que eso el episodio me hizo pensar que los guatemaltecos anhelamos hacer cosas, tan sencillas como reunirnos con un viejo amigo o tan complicadas como terminar la carrera de la universidad, pero generalmente no ponemos fecha para hacerlas, y por eso es que el tiempo se nos pasa y no logramos lo que queremos. Por esa razón es que una vez que definimos qué queremos tenemos que ponernos fechas límites para comprometernos con nosotros mismos y con su cumplimiento. Dentro de mis propósitos de año nuevo, recuerdo que te compartí que quiero bajar 25 libras en este año. Eso significa que debo proponerme bajar al menos 2 libras al mes, hasta el momento voy bien, acabo de pesarme recién ayer y justamente he bajado esa cantidad. También me acuerdo que te compartí que en febrero quiero retomar la natación los fines de semana. No sé cómo, pero tengo que cumplirlo, porque ya me puse una mes, no un “a ver cuándo”.  Si lo que queremos es dar un detalle, un beso, una llamada, o cumplir una meta quizá más trascendental, lo mejor es decidirte a poner fecha y hora, y cumplir con ella. Solo de esa forma podrás notar que avanzas. Y como dice mi amigo Freddy: auuuuu!!!!

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